Proyecto «Puente”, es una iniciativa creada a través de la Dirección Provincial de Protección Integral de las Personas Adultas Mayores, destinada a trabajar junto a la población en situación de calle mediante una labor con profesionales en psicología y trabajo social, para una posible re inserción en la sociedad o en el grupo familiar. Asimismo, se implementan políticas públicas específicas que permiten la satisfacción de las necesidades más inmediatas.
En ese marco, Marina Ibáñez responsable del proyecto, conversó con UNJuRadio sobre cómo es el trabajo que desempeñan junto a los y las voluntarias, los tipos de ayuda que brindan y las distintas realidades de las personas en situación vulnerable con las que topan todas las noches durante su recorrido por las calles del centro y barrios para entregar donaciones.
La integrante comentó que «hace más de cinco años venimos trabajando junto a las personas en situación de calle en nuestro refugio, un lugar donde pueden pasar la noche, higienizarse y comer». Asimismo, agregó que no sólo ayudan brindando asilo, sino que también, refuerzan las asistencias llevando a las personas que aún se encuentran viviendo en la vía pública platos de comida, ropa de abrigo o cualquier otra ayuda que necesiten.
Sobre la misma línea, Ibáñez resaltó que actualmente el Proyecto «Puente» cuenta con 20 personas voluntarias activas, que rotan sus turnos todos los días para colaborar con alrededor de 150 a 200 personas que se encuentran una situación vulnerable en los barrios Azopardo, San Pedrito, Malvinas, Mariano Moreno, El Chingo, Belgrano y el micro y macro centro de la capital provincial.
No obstante, indicó que dada la llegada del frío otoñal «hemos intensificado nuestra labor -en lo que respecta al- «Operativo Invierno», razón por la cual estamos articulando con Defensa Civil, el SAME, la policía y la fundación ATR (A Toda Rehabilitación) que se sumó este año» expresó.
Cabe agregar que, el refugio Proyecto «Puente» se encuentra en avenida Urquiza esquina Puente San Martín detrás del Paseo de los Artesanos, en los Galpones Recuperados. De manera que, las personas que deseen colaborar pueden acercarse al lugar y colaborar con ropa de abrigo, zapatillas para hombre, frazadas y elementos de limpieza. También, quienes deseen sumarse como voluntarios las puertas del refugio están abiertas.
Finalmente, la integrante del proyecto comentó que el trabajo que realizan todas las noches les permite observar cómo es la realidad que atraviesa cada persona que vive en situación de vulnerabilidad. Lo cierto es que «la gente no llega a fin de mes, no les alcanza para comer. Nos ha tocado ver a familias completas que nos esperan para recibir un plato de comida porque sólo les alcanza para pagar un alquiler o impuestos. Así que esa es la triste realidad que vemos en las calles de Jujuy», lamentó Ibáñez.
