Una de las metas de la educación para el siglo XXI es la educación en la diversidad, que implica reconocer las diferencias que existen en los grupos de alumnos y respetarlas mediante prácticas de enseñanza acordes con ellas.

Dentro de estas aulas heterogéneas hay alumnos que presentan una alta capacidad intelectual: aprenden con facilidad, recuerdan la información, son curiosos, muestran un nivel de razonamiento más elevado que lo esperado para su edad, resuelven los problemas de manera creativa y tienen una alta motivación ante el aprendizaje.

Las personas con altas capacidades representan un 15% de la población y, en Jujuy, el Departamento de Servicio de Acompañamiento Escolar, lleva adelante acciones de apoyo y contención para estos niños y niñas con altas capacidades y sus familias. 

«En general la atención está dirigida a las dificultades o a la discapacidad y muchas veces nos olvidamos de que las personas con altas capacidades también necesitan apoyo», comentó a UnjuRadio el Lic. Diego Pérez, psicólogo integrante del equipo del Servicio de Acompañamiento Escolar de la Secretaría de Equidad Educativa del Ministerio de Educación de la provincia.

Pérez explicó que las altas capacidades no solo significan tener un alto nivel cognitivo, sino que «estas personas pueden tener distintos talentos en lo artístico, lo deportivo, lo social» y además poseen «una forma diferente de aprender y relacionarse con los demás».

Respecto al trabajo que realizan en el área de acompañamiento a las personas con altas capacidades, contó que lo primero que se realiza es una evaluación.

«Estas personas están por encima de la media, generalmente esos chicos tienen ciertas características que se las observa desde muy pequeños: aprenden a hablar rápido, caminan antes, aprenden a leer y a escribir de forma autónoma, les gusta leer, miran películas, y, además tienen una sensibilidad especial por la naturaleza, son justicieros», agregó.

Los niños y niñas con altas capacidades necesitan un apoyo diferente en la escuela. Por este motivo desde el departamento trabajan en detectar estas habilidades y procurar desarrollar la capacidad innata. 

Para esto trabajan en conjunto con escuelas públicas y privadas y en todos los niveles.

«La detección de las altas capacidades debe ser en los primeros ciclos para poder desarrollarlas», sostuvo, por eso «es importante la capacitación en los docentes», para que puedan presentar a estos estudiantes un «plan de acción diferente, para seguir motivándolos, deben poder implementar estrategias para que cada alumno pueda avanzar a su ritmo y poder potenciar a estas personas».

Las evaluaciones a personas que podrían tener altas capacidades o talentos se realizan a partir de los cuatro años.

Por más información pueden dirigirse a Av. Santibáñez N°1782, donde especialistas llevarán adelante una serie de entrevistas y evaluaciones y definirán en conjunto con las familias las acciones a seguir.

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