Durante la mañana del martes, en el Tribunal en lo Criminal Nº 1 dictaron cadena perpetua contra Rodrigo Damián Villanueva, expareja de Alejandra Álvarez, la joven que fue asesinada el 9 de octubre del 2020 en el barrio Alto Comedero.

El imputado por la causa irá a prisión por el delito de “Homicidio triplemente agravado por el vínculo , ensañamiento y de una mujer cuando el hecho sea perpetrado por un hombre y mediare violencia de género”.

La abogada Mariana Vargas, habló en UNJu Radio sobre la sentencia y aseguró: «Este femicidio fue más violento más de lo habitual, en el sentido de que fue con mucho ensañamiento, que fue uno de los agravantes por lo que también se lo condenó, podría haber dado muerte a Alejandra que era su objetivo, con una o dos puñaladas pero le asestó más de 30, por lo tanto, realmente ahí está la rabia, el odio, el sufrimiento innecesario que infringió a Alejandra al momento de matarla».

Hay que recordar que Rodrigo Villanueva no admitió los hechos pero la justicia determinó su culpabilidad con las pruebas obtenidas en la investigación.

Sobre los agravantes, Vargas detalló: «En realidad hubo tres agravantes, el de femicidio, que sería la violencia de género, el ensañamiento y este vínculo de pareja o ex pareja o novios que existía desde los 13 años hasta poco antes de la muerte de Alejandra».

«Fueron tres agravantes, si tuviera tres vidas, serían tres perpetuas, pero tiene una, hoy la verdad que la legislación ha cambiado, hay una modificación en las leyes que hacen que la libertad condicional no corresponde, por lo tanto la prisión perpetua es prisión perpetua».

«También para cerrar el debate de los años, en realidad la prisión perpetua es la máxima pena, tenemos el ejemplo de Puch que fue condenado a prisión perpetua, ya pasó los 50 años y sigue sin estar libre, si hubiese sido condenado a 35 o 50 años, hoy estaría en libertad» aseguró la abogada.

Sobre la sentencia, Vargas explicó: «La verdad que estamos conforme con esta sentencia, era difícil que no ocurriera porque la verdad que estaban todas las pruebas, más allá de que él siguiera declarándose inocente, pero todas las pruebas lo que indican es que él entendía que tenía que asesinarla, que ella se merecía la muerte porque estaba en otra relación. Había finalizado la relación con él y había decidido estar con otra persona, eso él lo conoció, más allá de que lo negó, en realidad amenazó al otro joven, le pegó a ella, le rompió el celular por eso y la mató por eso».

Al ser consultada por la demora del juicio y la sentencia, Vargas aseveró: «Desde que se descubrió el cadáver, él está preso, por lo tanto, más allá de que no tengamos una sentencia teníamos asegurada la posibilidad de la pena, y si bien hubo demoras, también tenemos que tener en cuenta que fue durante la pandemia, no quiero justificar, pero efectivamente hubo una gran demora, pero la verdad que yo personalmente cuando estoy en un caso de estas características y tengo a la persona presa, entiendo que es parte de la Justicia esa prisión preventiva, que nos asegura el resultado, que es el de hoy, o sea que el tipo va a seguir preso. Distinta es cuando tenemos otras situaciones en las que el acusado está libre para llegar a juicio, ahí ya para mi la historia es muy distinta y te diría que a veces en estos temas, más allá de que estamos empezando a ver que las cosas cambian, nosotros teníamos el 100% de los casos de abuso sexual, cuando denunciaba una mujer adulta, se terminaba en absolución, porque se presume el consentimiento de la mujer siempre.»

«Entonces a veces tener al acusado preso, sin condena, por mucho tiempo, hasta que llega el juicio es la única reparación que se va a tener, entonces, incluso he pedido, en algunos casos que cuanto más demore el juicio en el que se va a absolver al acusado, es la única forma en la que vamos a tener algo de justicia para crímenes de género donde puede haber impunidad».

Por último, Mariana Vargas se refirió a cómo la espera afecta a los familiares: «Lo digo como profesional que se encuentra en un juicio, sin lugar a duda la familia necesita con premura cerrar esa etapa, necesita cerrar la etapa para poder hacer el duelo, porque hasta que no llega esta especie de paz, de cuasi paz, es como que no se puede, me parece que ahora sigue el dolor, la sentencia es un abismo entre quienes estamos logrando esto y nuestras emociones con el dolor y el llanto de los familiares, esto pasa todo el tiempo en estos juicios, pero desde ya que se necesita rapidez, en ese sentido, la demora genera mucho dolor».