A partir del año 2013, el 2 de mayo fue establecido como el Día Mundial contra el Bullying por más de 3 mil asociaciones de padres y madres y diversas organizaciones no gubernamentales de todo el mundo, con el objeto de concientizar sobre los riesgos del acoso escolar y los métodos para evitar la violencia.

Al respecto, María Zysman, fundadora de la Asociación “Libres de Bullying” sostuvo que todas las fechas que sirven para hablar de estos temas son importantes dado que “todos podemos hacer algo para que no haya bullying, tenemos que trabajar todo el tiempo para que el trato de la gente sea cordial, amoroso donde no haya lugar para el maltrato, la discriminación, el odio”.

En ese sentido, destacó que el bullying es un término pensado para niños, niñas y adolescentes que tienen que ser educados por los adultos, y cuando los adultos se maltratan entre ellos es otro tema que se aborda de otra manera, pero “sin dudas todo eso que hacemos los adultos cuando nos tratamos mal, les enseña a los chicos a tratarse entre ellos, el ejemplo que les damos es fundamental”, puntualizó.

Al ser consultada por el abordaje de las diferentes situaciones, Zysman recalcó que siempre que tienen que atender al pedido de ayuda de los chicos, es fundamental “mantener la calma, los chicos no les cuentan a los grandes lo que sucede porque se sienten avergonzados, culpables de generar un problema, tienen miedo que se desborden los padres, la abuela, entonces, le tenemos que generar un clima de calma, de confianza, como para que se sienta seguro que vamos a hacer cosas que lo ayuden y no que empeoren la situación”.

Por último, la especialista señalo: “Si alguien agrade hay alguien que es víctima y muchos espectadores que sostienen el desequilibrio de poder, por eso tenemos que trabajar con todos porque sino solo vamos a cambiar de destinatario”.