La presidenta de la Fundación “Hablemos de Autismo”, Dra. Viviana Maza, en diálogo con UNJu Radio 92.9 invitó al público en general a la Jornada a realizarse el sábado 2 abril en la glorieta de Plaza Belgrano a partir de horas 16, en el marco del “Día mundial y nacional de concientización sobre el Autismo” con el propósito de informar sobre el Trastorno de Espectro Autista (TEA). Asimismo dicha jornada también se llevará a cabo a las 16 hs en la Plaza Irigoyen de localidad de Yuto.

En este marco manifestó que este trastorno es una condición es decir cómo se degeneran las condiciones neuronales lo cual impacta en la parte social y comunicacional sea verbal o no, de una persona. Por ello desde la Fundación se insiste en la concientización e información con el propósito de mejorar su calidad de vida.

Los signos de alerta en el caso de un diagnóstico temprano en niños son: no realizan contacto visual, no responden al llamado principalmente de los padres, poseen hipersensibilidad táctil a ciertos tejidos o etiquetas de ropa como también en la parte auditiva ya que frecuentemente se tapan los oídos frente a ruidos altos, lloran sin causa aparente, no expresan malestar, les cuesta hablar o no lo logran y tienen conductas reiteradas. “Es importante que la familia inicie la consulta temprana para descartar o no un diagnóstico para comenzar un abordaje terapéutico de acuerdo a sus necesidades” explicó.

En el caso de la sociedad “no es necesario ser un experto en autismo para poder brindar ayuda frente a una crisis, por ejemplo en un supermercado donde hay demasiados estímulos, ruidos, colores y olores, debemos acercarnos y preguntar cómo podemos ayudar y no prejuzgar de que se trate de un niño malcriado con un simple berrinche ya que un niño con autismo verdaderamente la pasa mal y se expresa de esa manera” indicó. Se debe de utilizar pocas palabras pero a su vez claras para tratar de favorecer la organización en estas personas que padecen este tipo de trastorno.

Respecto al rol estatal como privado, intentar inscribir a niños autistas en las escuelas, se torna complejo y “debemos tener en cuenta que tienen el mismo derecho que todos a escolarizarse y de necesitar un acompañante terapéutico, debieran realizarse las respectivas adaptaciones curriculares por parte de maestros integradores, de manera de ver al niño como un desafío más que un problema” sostuvo. Convivir con la discapacidad es bueno para ambas partes ya que ellos también tiene virtudes para ofrecer.