Este domingo se produjo un sismo de 5.9 de magnitud en la escala de Richter entre Jujuy y Salta, el fenómeno se percibió con fuerza en varias localidades de la Quebrada de Humahuaca donde se registraron desmoronamientos y deslizamientos de piedras en los cerros. Autoridades de la Coordinación Provincial de Emergencias afirmaron que no hubo que lamentar heridos ni daños graves.

En ese marco, la Geóloga Natalia Solís, Directora del Instituto de Geología y Minería de la Universidad Nacional de Jujuy (UNJu), explicó que los sismos en la provincia de Jujuy ocurren porque «hay un reacomodamiento en nuestra corteza terrestre» de las placas Sudamericana y la de Nazca, particularmente en aquellos sectores «que están emplazados a lo largo de las serranías de Zapla, del Zenta y del Chañi» aclaró.

«Cuando ocurre un sismo, en un punto en el interior de la litosfera (corteza terrestre), hay una liberación de energía que se trasmite a través de las rocas por ondas sísmicas y ese punto donde se produce esa liberación de energía es lo que se llama foco o hipocentro» explicó Solís. En referencia al temblor de tierra que tuvo lugar ayer a las 13.40 hs., entre el limite de Jujuy y Salta a 17 km de profundidad, Solís detallo que se trato de un sismo «muy superficial y de una importante magnitud. Este movimiento sísmico ha generado que las capas que están aflorando en las superficies se desestabilicen y ocurra esa cantidad importante de derrumbes o deslizamientos en seco alertando a la población» subrayó.

La Geóloga recordó que la región este de la provincia de Jujuy, es considerada por el Instituto Nacional de Prevención Sísmica (INPRES) como zona 3, es decir, «una zona de sismicidad elevada en donde los sismos son superficiales y eso genera que el movimiento sea percibido con mayor intensidad por la población» puntualizó.

Por ultimo, Natalia Solís expresó que si bien la provincia de Jujuy «es una zona de riesgo sísmico» es casi imposible predecir cuando volverá a ocurrir un fenómeno de tal magnitud. En ese contexto, recomendó a los ciudadanos que construyan sus casas, «hacer un buen estudio para poder hacer una estructura sismo resistente que en el caso de ocurrir un sismo pueda soportar las ondas que transmiten energía» concluyó.