José Ortíz, un empresario gastronómico de nuestra provincia, explicó a Unju radio la delicada situación que atraviesa los diferentes miembros del sector.
Ortiz, manifestó que tras 5 meses de cuarentena hubo intervalos donde pudieron abrir las puertas de sus comercios, sin embargo la situación del sector gastronómico se va tornando cada vez más compleja .
“Se hace muy difícil, las deudas se siguen acumulando en diferentes conceptos, deudas impositivas, alquiler, luz, proveedores, el panorama es bastante complicado. Si bien nosotros los gastronómicos estamos habilitados para trabajar con delivery, para algunos las ventas representan el 10%, mientras que para otros no llega a eso”.
Además expresó, que en zona céntrica ya se perciben el cierre de diferentes negocios ante la crítica situación, “da miedo pensar en la cantidad de negocios que pueden cerrar si esto no se soluciona”.
Comentó que el apoyo que recibieron por parte del gobierno nacional fue la ATP para pagar los sueldos, “las ATP para gastronomía estarían garantizadas hasta fin de año según lo que está por sancionar la ley, esperamos que esto continúe».
Con respecto a nivel provincial, “hay una ley de emergencia turística en la cual solo los sectores gastronómicos con orientación turística lograron insertarse, eso les permitió obtener el beneficio en la excepción de ingresos brutos y rebajas en el pago de la luz. Desde el Ministerio de Producción se anticipó una línea de créditos a tasa 0 y el subsidio que por el momento tiene poca concreción por cuestiones burocráticas».
Durante estos meses el sector gastronómico puedo llevar adelante 2 reaperturas, la primera significo un movimiento aceptable que les permitió generar ingresos, a diferencia de la segunda reapertura donde las las ventas fueron negativas.
