Cada 16 de agosto se conmemora el día de San Roque, conocido como el patrono de los enfermos y de las mascotas en la fe católica, conocido por ayudar a las personas en tiempos de epidemia.
San Roque se acercó a un hospital de Roma para ayudar a curar a los infectados por la peste que arrasaba en la ciudad, allí fue donde se contagió de ese mal. Entonces se alejó de su Piacenza natal para instalarse en una zona deshabitada y desértica para no contagiar a otros, sufriendo la falta de comida ni bebida, y esperando la hora de su muerte, pero hubo algo que lo ayudó a sobrevivir: un perro de una casa importante de la ciudad empezó a tomar cada día un pan de la mesa de su amo e irse al bosque a llevárselo a Roque, y, según cuentan algunas versiones, todos los días lamía las úlceras de su cuerpo.
Este perro es el que aparece en la estampita que lo representa, y la razón por la cual también se lo considera el patrono de los perros, en la que aparece con un pan en su hocico, ofreciéndoselo al santo.
Apenas San Roque se sintió curado, se dispuso a volver a su ciudad de Montpellier, pero al llegar la ciudad estaba en guerra y fue confundido con un espía por los militares y lo encarcelaron. Estuvo 5 años en la prisión, hasta que murió el 16 de agosto de 1327.
No hay certezas sobre su fallecimiento, solo la fecha aproximada y que, al prepararlo para echarlo al ataúd, descubrieron en su pecho una señal de la cruz que su padre le había trazado de pequeño, por lo que se dieron cuenta que había sido hijo del gobernador de la ciudad. La gente de Montpellier acudió a su funeral y desde entonces empezó a conseguir de Dios admirables milagros y no ha dejado de conseguirlos por montones en tantos siglos.
Existe un dicho popular que perdura y que vincula al santo con el mejor amigo del ser humano: “¡San Roque, San Roque! ¡Que este perro no me mire ni me toque!”, reza el refrán, que se hizo masivo durante una epidemia de rabia, y se la pronunciaba para invocar la protección del santo.
En la provincia hay muchos grupos de voluntarios que ayudan a los perros que sufrieron abandono, algunos de ellos son el Hogar San Roque, Narices Fías Jujuy, Huellitas del Corazón San Pedro de Jujuy, S.O.S Patitas Frías La Quiaca, entre muchos otros que siempre necesitan colaboración de la comunidad jujeña para combatir el maltrato y abandono animal.
Incluso Unju Radio tiene una noble mascota: El Cacho