La Escuela de Minas “Dr. Horacio Carrillo” fue creada el 8 de julio de 1943 por el Gobierno de la Provincia de Jujuy. Posteriormente, de acuerdo a la ley Nº 21.036 fue transferida a la Universidad Nacional de Jujuy (UNJu) el 1 de enero de 1977.
Al momento de su creación, consideró por un lado, su finalidad, la cual era la necesidad de formar profesionales técnicos especializados en Minería, teniendo en cuenta la importancia de esta actividad y en general el incremento de la misma en toda la República. Por otro lado, se contempló sus funciones, las cuales estaban encaminadas a educar técnicos mineros que contribuyan al desarrollo de la industria pesada de nuestro país, con una preparación superior al minero práctico e inferior al Ingeniero de Minas.
Dentro de ese marco histórico y a 78 años de su surgimiento, el director de la escuela licenciado Fernando Sueiro y Sueiro conversó con UNJuRadio acerca del significado que tiene la institución tanto para sus estudiantes como para aquellos que desean ingresar y, comentó sobre los festejos que se han llevado a cabo.
En primer lugar, el director, resaltó «cuando se cumple 78 años, uno hace un balance general -sobre ese lapso de tiempo- y visualiza que fueron años de muchos proyectos, logros y -por supuesto- acciones para -concretar- en el futuro». Además, agregó que, tales aspectos se reflejan en la comunidad mediante el valor que la sociedad otorga a la Escuela de Minas, y a raíz de estos motivos es que siempre hay demanda de estudiantes por querer ingresar a la escuela.
En segundo lugar, resaltó la expansión de la escuela y destacó que haya sido un gran logro del rector Rodolfo Tecchi y del secretario académico, Mario Bonillo que tuvieron la iniciativa de crear sedes en las distintas regiones de Jujuy como en La Quiaca y Yuto.
Al respecto, Sueiro y Sueiro expresó «hoy podemos decir que un estudiante -de la Puna o Yuto- también tiene la oportunidad de ingresar a la Escuela de Minas, por lo tanto, también está ingresando a la Universidad».
Finalmente, y en referencia a los festejos, comentó «fue virtual, esta modalidad significó, por una parte, una ventaja, porque tuvimos la posibilidad de acercarnos a egresados de distintas promociones y hacer muchas publicaciones con sus saludos, además de presentaciones artísticas y discursos de las otras sedes. Por otro lado, la virtualidad implicó una desventaja en el sentido de que no pudimos hacer el típico chocolate con los chicos ni celebrar todos juntos -como era antes de la pandemia-«, concluyó.
