Los trabajadores de la salud vienen reclamando desde hace tiempo mejoras en sus salarios y en las condiciones de trabajo. Según informaron, la mayoría de los médicos y enfermeros cobran por debajo de la canasta de pobreza, y a esto se suma la vuelta de ganancias que coloca en la misma situación a quienes logran superar ese monto.
En este contexto, el acceso a la salud y el sostenimiento de la salud pública se ve seriamente comprometido ya que «Argentina está perdiendo muchos médicos que se van del país».
Así lo aseguró el presidente del Colegio de Médicos de Jujuy, Dr. Gustavo Echenique, que señaló que en los últimos meses «una sola provincia ya perdió 247 médicos».
«En los últimos años se fueron del país médicos muy bien formados de entre 40 y 55 años», dijo.
Esto implica que más de 75.000 personas se quedaron sin su médico, ya que un profesional «atiende entre 300 y 400 pacientes, y establece una relación muy cercana, conoce bien su situación».
«En Jujuy, más del 80% de los profesionales médicos también trabaja en el Estado, y estamos teniendo un éxodo muy importante, sumando a la falta de ganas de los colegas de realizar residencias para la especialización», contó Echenique.
Esto se debe a que una especialización «implica 4 o 5 años de una formación específica y dura, y un examen ante un tribunal, pero los montos y los honorarios que reciben los médicos no alcanzan para cubrir los insumos y gastos», explicó.
Por último, indicó que desde la Confederación Médica Argentina a la que pertenece el Colegio Médico de Jujuy, pidieron innumerables citas con las autoridades del Ministerio de Salud de la Nación para poder «plantear la situación y sus posibles soluciones», pero no obtuvieron respuesta.
«La salud, la educación y la seguridad deben ser los pilares de cualquier gobierno», finalizó.
