Néstor Ruiz, referente del movimiento ambientalista ´Juntos por un ambiente sano,´ en diálogo con UNJu RADIO 92.9, expresó: «cómo puede ser que los jujeños beban agua contaminada naturalmente con arsénico y con desechos tóxicos de las mineras, cuando el estado jujeño podría potabilizar, con los recursos que le haría el aporte de las mineras”. Con estas palabras, enfatizó su pedido para visibilizar el problema del agua y los daños que se producen por la megaminera en Jujuy.
El ambientalista dijo que este año querían marchar para festejar que el año pasado lograron la promulgación de la Ley de Glaciares, pero también porque el agua en la puna tiene muchas amenazas: «la falta de agua condiciona toda su producción y toda su vida».
En ese sentido, refirió que en Jujuy hay hechos sumamente delicados que amenazan el agua: «aquí tenemos todos los males». Aseguró que, por un lado, algunos tabacaleros lavan sus tachos de aerotóxicos en los canales de riego, usados por la vegetación y la ganadería. Por otro lado, mencionó a la megaminera de Chilquilla que mezcla su vertiente tóxica y veneno. También advirtió que Sales Jujuy “ventea más de dos millones de litros de agua contaminada a la atmósfera”.
En este contexto, describió que los productores agrícolas y ganaderos son quienes sufren sequías, no por fenómenos naturales, porque las precipitaciones son las mismas años tras año, sino por el hecho de que las napas subterráneas se van quedando sin agua a raíz de esta contaminación. Al respecto, afirmó que estos hechos están produciendo una creciente desertización en la Puna que paulatinamente va avanzando sobre las zonas más pobladas. “Esto afecta toda la producción y toda la vida de los jujeños,” resaltó.
Finalmente recalcó que: “si el Estado jujeño le cobrara a Sales Jujuy por el uso del agua que consume, lo que le corresponde por ley, , tendría plata para hacer un plan de potabilización de agua para todos los puneños para que no vivan en el dolor y la enfermedad”.
