Fernando Irimia, periodista argentino en España, brindó un informe de la situación que atraviesa el país en cuanto a la pandemia del coronavirus donde se registran 132.000 contagiados, de los cuales 12.500 fallecieron.
En ese marco, sostuvo: “Los números son preocupantes, la curva de crecimiento de contagios recién en las últimas 48 horas se puede decir que ha empezado a bajar, los datos son terribles, hay 132.000 contagiados, 38.000 se han curado, 12.500 han muerto, de los cuales los mayores de 80 años suman el 60 % de las mortandades, la gente que tiene entre 60 y 80 un 35%, el 5 % es gente menor de 60 años”.
Irimia destacó: “Barcelona y Madrid son las ciudades donde más se registran casos, y la parte del sur por suerte o por una cuestión climática, se está investigando, es la parte donde menos contagiados hubo”.
Al ser consultado por el aporte del gobierno a la salud pública para la lucha contra la pandemia, el periodista subrayó: “El gobierno tuvo que inyectar a la salud pública 210 millones de euros para poder comprar material sanitario. El gobierno está haciendo lo que puede, recordemos que es un gobierno de coalición de izquierda y la derecha está todo el día azotando porque cree que todas la medidas que toma el gobierno no son las correctas, pero valorar una situación así, si está bien o está mal, ya veremos con el paso del tiempo, porque es algo impensado, es algo que nadie se podía imaginar”.
Al referirse al régimen de aislamiento, Irimia señaló: “Aquí la gente no puede salir a la calle, no es un delito es una infracción, se han levantado 4 mil actas y se han detenido a 20 personas por saltarse la cuarentena”. Por otra parte y al hacer referencia a la situación de los empleados que dejaron de trabajar por el cierre de las diferentes empresas, dijo: “La mayoría que trabajaba en empresas que han cerrado, porque solamente están abiertos los supermercados, las farmacias, ortopedias, y algunas empresas que tengan relación a la salud; van a un Erte que es una especie de seguro de desempleo en el que le pagan el 75% de su sueldo con un máximo de 60 días, vencido este plazo tendrían que incorporarse al trabajo y la empresa asumir otras vez a los trabajadores, la única condición es que no se pueden despedir por 6 meses”.
