Mario Vilca, docente e investigador de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales de la UNJu, habló sobre la conmemoración del Día de los Fieles Difuntos o Día de las Almas que se celebra en todo el norte argentino el 2 de noviembre, además se refirió a la celebración de Halloween, una costumbre importada de los Estados Unidos que tiene lugar en la noche del 31 de octubre.

Al respecto manifestó que «estas celebraciones en el fondo tienen mucho en común pero los valores que se promueven son muy diferentes, no tienen que ver con el terror a los muertos, en los Andes tiene que ver con la vuelta de los ancestros y esto es una forma de un pensamiento muy antiguo y no científico -técnico ni desde la modernidad incluso tampoco tiene que ver con las concepciones occidentales de que los muertos no vuelven más.»

Y destacó que «en muchos pueblos no solamente andinos, las almas de los muertos vienen y ayudan, están en una dimensión paralela a las de los vivos y que ayudan con la fecundidad con lo que la gente llama «suerte» y hay una relación afectiva con los ancestros».

«Uno de los valores de todos santos que son prehispánicos es decir que el recuerdo de los ancestros no solamente como memoria sino como práctica que los ancestros están en nivel de realidad pero que no están en un nivel alejado sino que están en un universo paralelo en los cuales en estos estos momentos celebratorios se abre estas dimensiones y puede convivir con los humanos hay valores como por ejemplo; los valores como lo colectivo esa es la importancia del nosotros que hoy en las sociedades neoliberales está totalmente dejada de lado y al nosotros en las sociedades neoliberales lo llaman populismo de una manera trastocada»

Finalmente sostuvo que «sabemos que muchas de las celebraciones anuales en el calendario, el tema del nosotros y la importancia del colectivo es fundamental, mientras que Halloween traen valores un poco más relacionados a la individualidad al tema del miedo de la muerte, mientras que en las visiones andinas la muerte es la aceptación que somos finitos y que la muerte existe y que debemos asumir ese aspecto de la existencia».