El intendente de Yala, Santiago Tizón en diálogo con Unjuradio se refirió al relajamiento que observa en la gente y a cierto nivel de hartazgo hacia algunas normas de bioseguridad como el uso del barbijo y la prohibición de las reuniones sociales. En este sentido el jefe comunal recomendó a la población «no bajar la guardia» y ser conscientes de lo que ocurre en los países europeos donde la segunda ola de contagios de Covid 19 esta ocasionando graves problemas en los sistemas de salud.
Tizón manifestó su preocupación por las reuniones sociales con amigos y familiares, «porque casi todos los contagios fueron en ese ámbito» indicó.
Sobre el cumplimiento de los protocolos de bioseguridad en el municipio ecoturístico de Yala, el intendente apeló al sentido común y a la responsabilidad individual de cada persona. No obstante, agregó que las piletas de la zona cuentan con sus respectivos protocolos además se redujo la cantidad de personas que pueden ingresar a las mismas.
“El mayor control que tratamos de llevar es en los negocios cerrados como los comercios y almacenes. Tratamos de que no superen el ingreso de la capacidad de personas permitida y que quienes ingresen usen el barbijo” detalló.
Por otra parte, agradeció el apoyo que le brinda el Ministerio de Seguridad de la provincia, con quien coordinan actividades de prevención y control en cuanto a la cantidad de personas y de vehículos que pueden ingresar a la zona de Los Nogales. “Los vecinos están contentos con eso porque sienten que han vuelto a tener cierta tranquilidad” enfatizó.
En relación al carnet de conducir que otorga el municipio de Yala, Santiago Tizón aseguró que siguen teniendo validez y que su intención es sumarse al sistema nacional lo antes posible. Aclaro que en esa localidad no fue necesario prorrogar el vencimiento del carnet ya que no hubo «una gran demanda de turnos» para solicitar y renovar el carnet.
Finalmente. el intendente advirtió a aquellos que alquilen casas de verano, que habrá estrictos controles para evitar las fiestas clandestinas, se verificará que el volumen de la música no moleste a los vecinos, que no se supere la cantidad máxima de personas que pueden estar en el lugar y que haya una persona mayor de edad que sea responsable.