Desde la administración de las clínicas y sanatorios PYME pusieron en conocimiento de las autoridades del gobierno provincial y de la población en general, la crítica situación de los establecimientos de salud ante la decisión tomada por el Instituto de Seguros de Jujuy de retribuir con valores arancelarios distintos la misma prestación médica, según cual sea el sanatorio o clínica donde el afiliado sea atendido, sin respetar el principio constitucional de igual remuneración por igual tarea.
En el comunicado emitido, destacaron que la marcada diferenciación en el pago pone en jaque la continuidad de las prestaciones en el interior de la provincia y algunos sanatorios de la Capital, que en su conjunto cuentan con más de 300 camas de internación y alrededor de 500 puestos directos de trabajo.
Además, señalaron que entendiendo la importancia del servicio esencial de salud, y en consecuencia continúan brindando atención a los afiliados del Instituto de Seguros con total normalidad y siendo un pilar fundamental para la atención de pacientes COVID-19 durante la pandemia, salvando cientos de vidas.
La discrecionalidad del poder administrador y actuar discriminatorio, se da en un contexto de aranceles sin actualizar desde Septiembre de 2019 y constituye un hecho sin precedentes en el sistema de salud jujeño, puntualizaron.
Cabe resaltar que las clínicas y sanatorios PYME son: Clínica Ledesma, Sanatorio San José, Instituto Médico del Norte, Clínica Galo, Clínica Mayo y Clínica La Quiaca.
En ese contexto, Cristina Ferreyra, integrante del directorio de la Clínica Mayo, señaló que “hay una resolución del instituto de Seguros de Jujuy que nos afecta de forma directa, porque establece un aumento de los módulos, según las categorías de las clínicas”.
“Esto pone en riego más de 500 puestos de trabajo y afecta la economía de las clínicas”, añadió.
