El hecho, registrado por videos de varios testigos, ocurrió en pleno auge de las protestas en EE.UU y todo el mundo contra la injusticia racial y la violencia policial desatadas por el asesinato del también afroestadounidense George Floyd, en manos de un policía blanco hace tres semanas en Minneapolis.
Un joven afroamericano fue asesinado tras recibir balazos en la espalda por parte de policías de la ciudad de Atlanta, en el estado de Georgia. El hecho sucedió luego de que se resistiera a ser detenido tras dar positivo en un control de alcoholemia. Medios locales obtuvieron un video en el que se ve alrededor de las 10:30 p.m del viernes 12 de junio a los policías recibiendo una llamada de que en un automóvil en el que dormía el hombre estaba bloqueando otros automóviles en la fila.
El asesinato de Rayshard Brooks, de 27 años de edad, ocurrió en la entrada de un local de comidas rápidas en una de las principales avenidas de esa ciudad. Varias grabaciones de lo ocurrido se publicaron en redes sociales, y varios testigos hablaron con distintas cadenas de televisión norteamericanas: el hombre se había quedado dormido sobre el volante mientras hacía la cola para comprar en el local de comidas rápidas. Su auto ni siquiera impedía que los otros clientes pudieran llegar a la caja, ya que sólo tenían que rodear el auto de Brooks hasta la ventana, sin embargo, decidieron llamar a las autoridades para hacerse cargo de la situación.
A la mañana siguiente comenzaron las movilizaciones de protesta en las puertas del local de comida rápida, que finalmente tuvo que cerrar sus puertas. Un grupo de manifestantes se congregó a las afueras del restaurante para reclamar por este nuevo crimen, reportó el diario local Atlanta Journal-Constitution. «Sin justicia no hay paz», «Las vidas de los negros importan» y «Otro hombre negro fue asesinado en su barrio», decían algunas de las pancartas llevadas por los asistentes -muchos de ellos con tapabocas por la pandemia de coronavirus-, que declararon al lugar del crimen como «la nueva zona cero».
El asesinato de Brooks se produce tres semanas después del caso de George Floyd, que fue detenido por la policía de Minneapolis el 25 de mayo pasado. Un video muestra cómo un policía presionaba con una rodilla contra Floyd, tirado en el piso. El hombre se quejaba de que no podía respirar y murió pocos minutos después. Su muerte derivó en incidentes en las principales ciudades norteamericanas y la repulsa mundial, al tiempo que el presidente Donald Trump amenazó con militarizar y reprimir a quienes reclaman contra el racismo.
