El vocero presidencial, Manuel Adorni, dijo este miércoles en conferencia de prensa, que el Gobierno «está evaluando» la posibilidad de convocar a una paritaria docente nacional, aunque aclaró que todavía «no hay ninguna definición al respecto» pese a que la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera) y los sindicatos agrupados en la CGT, advirtieran que «peligra el inicio de clases».
Además, el vocero dijo que «en principio, la Nación no va a transferir» a las provincias, como solicitaron los ministros de los 24 distritos a través de una nota dirigida al Secretario de Educación de la Nación, Carlos Torrendel, los recursos económicos correspondientes al Fondo Compensador de Desigualdades Salariales (FONID) y los comedores escolares porque «considera que hoy no tiene existencia, no existen».
De este modo, el panorama de cara al inicio del ciclo lectivo el próximo 26 de febrero, es complejo.
«Escuchamos en los medios la conferencia de prensa y ahí nos informamos que el presidente decidió no dar continuidad a los fondos del incentivo docente que está vigente desde 1998», dijo a UnjuRadio la ministra de Educación de la provincia, Miriam Serrano.
En este sentido, sostuvo que la situación es «muy preocupante» y que, hasta ahora, el gobierno de la provincia asumió con fondos propios el pago de este ítem del salario docente.
Serrano explicó que «la restitución de esos fondos se hace de forma semestral», por parte de Nación, pero que aún «no hubo reconocimiento del último trimestre de 2023».
Asimismo, señaló que aún no recibieron comunicación formal acerca de esta definición pero que están «preocupados viendo como enfrentar estos gastos a futuro», en comunicación y coordinación con los ministros de Educación de las 24 jurisdicciones del país.
«El incentivo docente significa entre el 10 y el 15 por ciento del salario de los docentes, y todo componente del salario es importante, sobre todo en esta situación económica compleja que estamos atravesando», señaló y manifestó: «queremos que Nación de una repuesta formal«.
«Es importante tener más certezas sobre el envío de fondos, ya que esto va a interferir en el inicio de clases y en la posibilidad de crear una política educativa en las provincias».
Respecto al inicio de clases, la ministra aseguró que se encuentran trabajado en «el mantenimiento básico de los establecimientos» y en los «deterioros que generaron las lluvias», pero que esperan estar en condiciones para el 26 de febrero.
En relación a las comidas que reciben los estudiantes en la escuela, explicó que «es el Ministerio de Desarrollo Humano quien aporta los alimentos para cumplir con los contenidos nutricionales», y que se encuentran «trabajando para asegurar la provisión».
«Sabemos que ésta comida algunas veces es la única comida de los niños. Hoy la escuela también hace contención social además del aprendizaje, y en esta situación compleja de hoy, va a ser una demanda que vamos a tener que atender fuertemente», sostuvo.
Por último, y ante la decisión del Gobierno nacional de suspender subsidios y envío de fondos a las provincias, luego de la caída de la Ley Ómnibus en el Congreso Nacional, la ministra aseguró que, «mas allá de algunos planteos, enojos y revanchas, la educación de nuestros niños y jóvenes no puede ser una moneda de cambio en esta situación».