La licenciada en nutrición Gabriela Oroza, en diálogo con UNJuradio 92.9, habló sobre el proyecto de ley de Etiquetado Frontal de Alimentos. Explicó que permitirá y facilitará, de manera sencilla, «identificar un alimento no saludable a través de los octógonos negros que marcan el exceso de algún nutriente crítico». Refirió que lo podrán hacer, tanto las personas alfabetizadas como las que no saben leer. Además, explicó su objetivo y los motivos de la demora en su tratamiento en nuestro país.
Al respecto, indicó que los etiquetados actuales son muy pequeños y que están ubicados en un lugar poco destacado: «uno no va al supermercado con lupa para leer esas letritas ni a sumar calorías para pasarlas a gramos. Ni los nutricionistas hacemos ese trabajo».
La licenciada informó que se proponen 5 octógonos que indicarán si el alimento es rico en sodio, grasas totales, grasas trans, azúcares, o en hidratos de carbono. «El que no sabe leer o está apurado, al ver el octógono sabrá que ese alimento tiene algún exceso de nutriente crítico. Hasta los pequeños lo perciben», destacó.
Por qué Argentina no pudo implementar esa ley hasta ahora
En relación a la demora en la implementación de esta ley en Argentina argumentó: «los productores de alimentos piensan que esta ley les va a jugar en contra, por lo que trataron de distender esta política pero tenía que llegar en algún momento. En los países que se ha aplicado, se han visto mejoras considerables en la selección de alimentos».
En ese contexto, manifestó que «en Argentina se pusieron muchas trabas en la rueda para que esto no avance de manera más fluida. Algunos productores piensan que se les va a acabar la venta de sus productos. El tema es que ahora la gente sabrá lo que tiene cada producto y si le conviene o no». En ese sentido, dijo que hay que explicarles que esta ley no es algo en contra de ellos ni para desfavorecer ese sector.
Objetivo de la ley
De ese modo, Oroza sostuvo que la ley busca prevenir la malnutrición. No por una cuestión estética sino por la salud de la población, porque hay gran cantidad de gente con sobrepeso y obesidad con patologías graves, consecuentes a esta situación epidemiológica. «La cuarentena fue un momento de menor actividad física y de mucha angustia en el que la gente trataba de canalizar la misma comprando algo rico. Eso se está notando ahora», concluyó.
Lic Gabriela Oroza
