El 3 de junio se celebra el Día Mundial de la bicicleta. Por su accesibilidad, la bicicleta es un medio que facilita la inclusión e integración social además de promover la actividad y el bienestar físico.
Esta fecha fue establecida por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en el año 2018 con el objetivo de promover la seguridad de los ciclistas y también para integrar este rodado en la planificación vehicular urbana considerando a la bicicleta como una alternativa a los vehículos motorizados.
En el año 2020, debido a la situación de pandemia, la bicicleta se convirtió en el medio de transporte por excelencia en todo el mundo.
En argentina su uso creció un 156% ubicando al país –según datos recopilados por Google Maps- en el puesto 15 en el mundo y en el 3 en Latinoamérica-detrás de Brasil y México-.
Los beneficios de andar sobre dos ruedas son numerosos tanto para el ciclista como para el planeta. Andar en bicicleta colabora en la reducción del cambio climático, disminuye la contaminación, la congestión del tráfico y a nivel personal contribuye a disminuir el estrés.
Nuestro país cuenta con un parque de bicicletas que ronda los 8,5 millones, y en los primeros meses de la pandemia la venta de estos rodados superó ampliamente el promedio anual que es de un millón y medio de unidades vendidas. Estas cifras evidencian que hay aproximadamente un 20% de la población en el país que usa la bicicleta para transportarse.
