El periodista y sociólogo Jorge Elbaum en diálogo con UNJu Radio 92.9 realizó un análisis sobre el conflicto bélico Rusia – Ucrania resaltando que el conflicto dejo entrever a los rusos con un tercer poder global, junto a EEUU y China.
En este marco manifestó que se habla de negociaciones de paz donde ambas partes sugirieron que existe la posibilidad de incluir los puntos que exigía Rusia desde un inicio. Por un lado la autonomía de dos zonas de bombas y drones que se convertirían en Repúblicas Populares Independientes, la desaparición de los batallones neonazis incorporados a las fuerzas armadas y la asunción por parte de Ucrania que no sería a futo parte de la OTAN.
Respecto a la resolución del conflicto bélico se resuelve una parte mediante negociaciones y otra mediante batallas. Al respecto, en la zona este de Ucrania se encuentran instalados los históricos batallones nacionalistas que reivindican a quienes comandaron los grupos nazis en la 2° guerra mundial, lo cual constituye la principal causa de que el 80% de las acciones bélicas de Rusia se desarrollen en Ucrania; mientras que el 20% restante se desarrolla en la zona oeste para evitar la concentración de todas las tropas ucranianas en donde Rusia decidió finalizar con los batallones neonazis.
En este contexto “Rusia está decidida a acabar con esos batallones y sentarse a negociar mediante acuerdos frente a terceras potencias como China con la probabilidad de que a mediados de este mes se pueda contar con fin de las acciones bélicas. Todo ello, en el marco del desfile del 7 de Mayo que seguramente Rusia realizará, anunciando su victoria” explicó.
En cuanto a las sanciones económicas que incluían un bloqueo de fondos en euros o en dólares “Rusia deberá pagar el gas provisto en rublo o en oro hasta hoy, como fecha límite de vencimiento. No obstante los objetivos pretendidos con este tipo de sanciones se están volviendo en contra de la OTAN y sobre todo para el grupo occidental ya que los rusos, al ser no ser un país pequeño, no están habituados a rendirse” indicó.
Cabe resaltar que esta guerra generó el acercamiento entre Rusia y China y en la actualidad el 80% del comercio mundial pasa por el sudeste asiático y no por el atlántico. Por ende Rusia vuelve a formar parte de una lógica de poder global, junto a EEUU y China, a partir de su importancia en la exportación de materias primas y del poder sostener su moneda. Otra consecuencia de este conflicto es que el eje entre Moscú y Beijín se consolida en términos militares como el gran desafío de la próxima era para EEUU.
