Como cada 24 de marzo, en conmemoración del Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia, diversos organismos de derechos humanos marcharon juntos con agrupaciones y movimientos políticos, sociales y gremiales desde el Parque de la Memoria, ubicado en la Avda. General Savio, hasta Plaza Belgrano. Después de dos años de pandemia donde no se pudo
La populosa marcha recorrió la Avda. Gral. Savio hasta el Penal de Gorriti donde se detuvo para recordar que fue un centro clandestino de detención en San Salvador y luego continuó hacia la plaza principal de nuestra ciudad.
Participaron de la convocatoria Hijas e Hijos por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio regional Jujuy -H.I.J.O.S-, Madres, Familiares y Amigos de detenidos desaparecidos de Purmamarca con la banda «Anaterxs», el Movimiento «Ailén Chambi», Abogados y Abogadas del Noroeste Argentino en Derechos Humanos y Estudios Sociales -Andhes Derechos Humanos Jujuy-, Asociación de Trabajadores del Estado -ATE-, entre otras agrupaciones.
Una vez en la plaza la movilización dio una vuelta simbólica, haciendo alusión a la forma de protesta y pedido de aparición con vida de hijos, hijas y familiares que realizaban las Madres de Plaza de Mayo en Buenos Aires.
Finalmente, en la Glorieta, hizo uso de la palabra María «Negra» Arroyo de H.I.J.O.S Jujuy, donde se pronunció en contra de la remodelación del antiguo cabildo, lugar que durante la dictadura cívico, militar y eclesiástica se utilizó como centro clandestino de detención, además de ser el lugar donde tomaban los datos identificatorios a los civiles detenidos ilegalmente.
Durante su alocución, Arroyo, reclamó al Gobierno Provincial, que haya infringido la Ley N°26.69 de Preservación, Señalización y Difusión de Sitios de Memoria del Terrorismo de Estado. «Se entiende por sitios de memoria a todos aquellos lugares donde se cometieron graves violaciones a los derechos humanos, o donde se padecieron o resistieron esas violaciones, o que por algún motivo las víctimas o las comunidades locales consideran que el lugar puede rendir memoria a esos acontecimientos, y que son utilizados para repensar, recuperar y transmitir sobre procesos traumáticos, y/o para homenajear y reparar a las víctimas» y por lo tanto «declara Sitios de Memoria a “los lugares que funcionaron como centros clandestinos de detención, tortura y exterminio o donde sucedieron hechos emblemáticos del accionar de la represión ilegal desarrollada durante el terrorismo de Estado ejercido en el país hasta el 10 de diciembre de 1983”.
