El jueves 11 de noviembre en horas de la mañana una funcionaria del Ministerio Público de la Acusación de Jujuy (MPA), María Eugenia Ríos, en compañía de su asesor legal presentó en la sede de tribunales una denuncia por «hostigamiento laboral y violencia de género» contra el titular del MPA, el Dr. Sergio Lello Sánchez.
Sobre la denuncia, el abogado Julián Martín, representante legal de la funcionaria del MPA brindó algunos detalles de la denuncia presentada en Tribunales. “Estamos haciendo la presentación formal de una denuncia contra el titular del Ministerio Público de la Acusación por algunos delitos que están establecidos en la denuncia”.
El abogado consideró que “es de gravedad lo que está sucediendo” en el Ministerio Público de la Acusación por lo que que instó a la justicia de la provincia «para que decida sobre esta cuestión”.
“Consideramos y creemos que hay varios delitos que se habrían cometido en contra de la doctora y estamos instando a la justicia a que investigue y averigüe” indicó el letrado.
Señaló que se están presentando “demasiados elementos probatorios que acreditarían lo que dice la doctora Ríos” y en ese sentido Martín considero que la denuncia «es viable» y que una vez por todas «la justicia hable y se termine la violencia y las persecuciones contra mujeres y miembros del Ministerio Público de la Acusación”.
Por su parte, la denunciante, María Eugenia Ríos, informó que «la denuncia se presentó ayer contra el titular del organismo por violencia de género».
«Hace 5 años que estoy trabajando en el Ministerio, y hace 4 años y medio que vengo sufriendo persecución laboral y violencia de género», manifestó.
Asimismo, señaló que actualmente se encuentra con carpeta médica psiquiátrica, y a pesar de su estado de salud «igualmente se me sigue hostigando e instando a que me presente a explicar los motivos de mis publicaciones en redes sociales», y además, «se me llamó a retirar mis muebles personales de mi oficina».
Ríos expresó que tiene «pruebas de las lesiones auntoinfligidas, de los ataques de pánico y el estrés» a los que llegó por esa situación, y agregó que presentó la denuncia porque «ya no podía más».
«No me siento en condiciones de expresar lo que esta persona me hacía», dijo e indicó que «dentro del MPA es sabido por todos los colegas que no soy la única que sufre estas situaciones de violencia, y muchos se callan por miedo».
La denunciante reveló que «es tanto el temor ahí adentro que nadie se anima a hablar», y remarcó que esta denuncia «no es una cuestión política», sino que intenta «ponerle un fin a las agresiones y salvaguardar mi trabajo».
«Espero que de una vez por todas la Justicia haga algo», concluyó.
