Hace unas tres semanas se realizó en Jujuy el primer trasplante de hueso en el sistema público de salud. La paciente de 35 años de edad fue sometida a una intervención de injerto cadavérico realizada en el Hospital Pablo Soria. La mujer que ya había sido intervenida con anterioridad se volvió a romper el ligamento de una de sus rodillas por tercera vez.
Para conocer más en profundidad sobre el tema, UnjuRadio entrevisto al Dr. Fabian Lizarazu, médico especialista en traumatología, quién se desempeña profesionalmente en el sector público y privado de la provincia. Destacó que la operación es un «acontecimiento importante para la salud pública de la provincia. El trasplante de huesos se da en ciertos casos donde el o la paciente a causa de un accidente de transito han perdido una cantidad importante de huesos. «Cuando no se puede suplantar por huesos propios es cuando se usan huesos cadavéricos» afirmó el facultativo.
En primer lugar, el especialista comentó que para realizar el injerto se solicitó la autorización al INCUCAI (Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante). La gestión la realizó el Dr. Luna, que es quien preside el CUCAI JUY, y aclaró que el trámite «demoro unos meses» debido a la pandemia.
Según explicó Lizarazu, antes de la intervención quirúrgica se realizaron una serie de estudios para constatar la ruptura del ligamento, ya que se había roto con anterioridad y en esa ocasión se utilizaron injertos propios de la rodilla de la paciente. Tras obtener la autorización para recibir el injerto cadavérico se realizó la cirugía en el Pablo Soria, la cual duro alrededor de una hora y media, ya que, de acuerdo a lo que explicó el médico, “fueron tres cirugías”, primero debían retirarse los tornillos previos que tenía la paciente en la rodilla, colocar el injerto, y posteriormente una revisión estética en la que se “utilizó una técnica particular”.
Luego de la cirugía «la paciente reaccionó de manera favorable y comenzó con el tratamiento de fisioterapia» indicó.
El especialista detalló que el hueso que se uso para realizar el injerto en la rodilla de la paciente fue enviado desde la Universidad de Córdoba. «Se guardó en la heladera de hemoterapia del Hospital hasta el día en que se realizó la cirugía» agregó.
El Dr. Lizarazu detalló que “el trámite con el INCUCAI es rápido y seguro, y una vez que se realiza la cirugía deben realizarse los controles por dos años”, además advirtió que los injertos cadavéricos “no son de uso masivo”, sino que “es una última alternativa para cierto tipo de pacientes”, destacando los casos de accidentes de tránsito que tengan una pérdida masiva de huesos.
Finalmente destacó que el Hospital -Pablo Soria- cuenta con «gente capacitada» y con los recursos para realizar este tipo de trasplantes, además de contar con una estadística alta en lo que respecta a las cirugías traumatológicas, “tenemos un importante caudal de pacientes, no solo recibimos gente de capital, sino de toda la provincia e incluso del sur de Bolivia y algunos pacientes de Salta” señaló.
“La atención es para todos” enfatizó el profesional.
