Ante el inminente inicio de la segunda ola de Covid-19 en todo el país y en la provincia, el Director del Hospital Pablo Soria, Dr. César Mulqui, dialogó con UNJu Radio acerca de la situación del nosocomio ante el avance de casos y la atención al personal ante las situaciones de estrés, además se refirió al aumento de accidentes viales.
Relató que están permanentemente chequeando los números de infectados por Covid-19, y en contacto con el Hospital San Roque por el tema de las camas, y expresó que espera que no se produzca un colapso.
Según lo mencionado por el médico, por el momento no se va a tratar a “pacientes de Covid mudos”, que son aquellos que no tienen ninguna otra enfermedad aparte de síntomas respiratorios leves, pero si se atenderá específicamente a los casos que se acerquen por causas, o accidentes relacionados al Covid, ya que “es el único hospital en que se pueden hacer cirugías”, por ejemplo casos neurológicos o gastroenterológicos.
En lo que respecta al personal de salud, manifestó que el recurso humano médico específicamente, “está disminuido porque muchos por el tema de la pandemia se han retirado o se han jubilado”, y reponer a ese personal no es tan rápido como se espera, “por lo tanto eso hace que trabajemos con menor cantidad de profesionales”, relató.
En este sentido comentó que “hay mucho agotamiento porque no se paro” y que, al pasar el pico de la primera ola, al comenzar a salir más gente, comenzaron a ocurrir accidentes, por lo que señaló que “el hospital está trabajando casi a tiempo completo”, y que hay muchas camas ocupadas por este tipo de pacientes, e incluso la sala de cirugías está a su máxima capacidad.
Es por esto que plantea que el personal está agotado, ya que se ha trabajado todo el tiempo, “sumado al estrés de atender un paciente con Covid-19, con los riesgos que significaba en el momento en que no había nadie vacunado”, declaró, y respecto a la salud mental de los profesionales, comentó que tienen un equipo de psicólogos en el hospital para ayudarlos ante estas situaciones, además de que se trató de dar licencias fraccionadas para que puedan descansar, “no es una situación fácil”, expresó
Recordó que la provincia fue una de las primeras en ser afectadas durante la primera ola, lo que permitió conseguir profesionales de afuera para tratar a los pacientes de Covid-19, planteó que “ahora tenemos una cantidad de casos que pueden ser manejados por el Hospital San Roque, y eventualmente por otras instituciones”, también señaló que “en caso de que se produzca un pico como el del año pasado, habría que ver si podemos sostenerlo”, y que, en el caso de verse superados seguramente se volvería a pedir ayuda.
En cuanto a la inmunización del personal, comentó que “prácticamente todo el personal está vacunado, salvo quienes no quisieron hacerlo que fueron pocos”, y explicó que la programación de la vacunación es algo que viene desde el Ministerio de Salud, y ellos solo se encargan de avisar quienes serán inmunizados.
Siguiendo con el tema, se refirió a las consultas por las secuelas de esta enfermedad, que tienen que ver en muchos casos con trastornos en el sueño, reumatológicos, “hay patologías de todo tipo, especialmente neurológicos”, explicó. “Nunca en mis 39 años de servicio he visto tal cantidad de variaciones en un paciente”, declaró.
Destacó que un caso claro de esta variable en los síntomas, es el del periodista Mauro Viale, “estaba estable y tuvo un infarto masivo”, y comentó que ahora el tipo de lesiones que se daban en los adultos mayores, están manifestándose en personas más jóvenes, “las terapias ahora están ocupadas por gente de la mediana edad”, aseguró.
Finalmente mencionó que el hospital está en condiciones de asistir a pacientes que necesiten oxígeno, y que “no hacen falta obras significativas, ya que tenemos equipo para manejar respiradores dimensionados para esto”. Planteó que el principal problema era que el hospital es chico, y por esto no estuvo preparado para el gran brote de casos del año pasado, por lo que hubo que armar la infraestructura no solo allí, sino en otros hospitales, pero que ahora están cubiertos en ese sentido y “el hospital está preparado para el manejo de pacientes complejos”, concluyó.
