La nueva versión de los barbijos desarrollados por el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (CONICET) posee una capacidad filtrante para polvos y gotículas de más del 97 por ciento.
De acuerdo a lo comunicado por el Organismo, supera al modelo Atom Protect original porque contiene cuatro capas de protección, cada una confeccionadas con materiales específicos: una externa semi impermeabilizante que lentifica el ingreso de microgotas; una segunda capa de tela tejida de algodón poliéster con los mismos activos antivirales que el primer modelo de barbijo.
En cuanto a la tercera capa, la tela no es tejida y tiene capacidad filtrante certificada por Nelson Labs (un proveedor líder en pruebas de laboratorio ubicado en Estados Unidos), del 97,1 por ciento para polvos a partir de 0,1 µm (micrómetros) y del 99,9% para aerosoles acuosos de cloruro de sodio (esta última medición realizada por el equipo desarrollador). Por último, una capa de tela tejida de algodón poliéster con los mismos activos bactericidas y fungicidas que el primer barbijo Atom Protect.
En suma la eficiencia de filtración de bacterias del filtro incorporado en el ATOM PROTECT 95 es de 95,9 por ciento y frente a aerosoles acuosos del 99,9%
Por último, el CONICET detalló que las telas de los barbijos están diseñadas para prevenir la dispersión del COVID 19 por parte de quienes los usa, pero también se las emplea para proteger a las personas de salpicaduras, aerosoles de sangre o fluidos corporales. En un mismo sentido, la confección de los barbijos con dichos materiales previenen la acumulación de virus, bacterias u hongos generados por la exhalación respiratoria del usuario o usuaria y la recibida desde el exterior. Logran, además, inactivar virus de la superficie del barbijo y disminuir la carga viral enviada/recibida al/del medioambiente.
