Fueron palabras de Federico Posadas, que habló en UNJu Radio 92.9 sobre la posible habilitación en la apertura de vuelos para algunas provincias priorizando en trabajadores esenciales o razones de fuerza mayor, lo cual podría también favorecer alguna posible apertura turística.
Sobre el tema se refirió: «efectivamente en un momento el Ministro de Transporte de Nación informó a los medios que entre el 12 y el 15 de octubre volvían los vuelos regulares a la Argentina, inclusive los internacionales. Pero hoy circuló la información de que si vuelven los vuelos, sólo serían para las actividades esenciales, las excepciones, ya no hablan de los vuelos regulares, están esperando la resolución de Nación para ver si se extiende la cuarentena, en caso de extenderse la cuarentena, los vuelos también se pospondrían, lo cual es obviamente una muy mala noticia para el sector».
«Estábamos con bastantes expectativas por la posibilidad de los vuelos, ya que con el regreso de los vuelos, se disparan muchos movimientos, ya teníamos que empezar a resolver el tema de los ingresos, estábamos consensuando con las provincias del norte, junto con otras provincias, como hace la gran mayoría de los países del mundo, en donde si hay una persona contagiada esté asegurada».
Al ser consultado por el impacto del turismo en la provincia, Posadas aseguró: «el turismo mueve muchísimos puestos de trabajo, como bien decía el Gobernador, son 25 mil puestos de trabajo contabilizados durante el año 2019, 170 millones de dólares de impacto turístico, cerca del 7% del producto bruto geográfico de la provincia, pero en algunas localidades como Tilcara, Purmamarca, a los cuales les representa más del 30% de los ingresos para los municipios, hay algunos que dependen mucho del turismo».
Por último Posadas se refirió a la reserva de alojamientos «es algo que se puede hacer pero es un arma de doble filo, porque uno por ahí está comprometiéndose a brindar un servicio que no sabe si va a poder cumplir, obviamente que se abastece de recursos a corto plazo pero tiene que cumplir a largo plazo con lo cual corre el riesgo no sólo el turista potencial que compra eso sino el sistema de que puede colapsar. Por ahí si sirve para subvencionar a las empresas a corto plazo, pero en la medida de que uno no tenga la garantía de poder cumplir, es medio peligroso».
