El párroco Miguel Aciar Díaz, en diálogo con Radio Universidad, denunció sucesivos hechos de robo y asaltos a las propiedades de la iglesia y a algunos miembros. Expresó que la zona está liberada y se refirió a otro hecho delictivo ocurrido en otra institución de la que está a cargo.
“En la madrugada del 31 me llamaron los catequistas que viven cerca de la zona y fui a constatar los daños que hicieron. Hubo robo de bienes en las aulas de catequesis pero también quedó la sensación de inseguridad. Ya no nos sorprende que nos roben, sino más bien estamos expectantes a cuándo será la próxima vez, y eso también es lamentable”, detalló el religioso.
El padre Miguel se refirió a otros robos ocurridos: “En este sector de la zona sur son ocho las veces que hemos sufrido estas situaciones pero también las escuelas, los centros de salud, los centros vecinales y los particulares se ven afectados. Ayer a las cinco de la tarde, también en las aulas de catequesis, el grupo de pesebre estaba esperando para comenzar las visitas y dos de las adolescentes fueron asaltadas y le sustrajeron el celular”.
El párroco señaló: “sé que las instituciones civiles han hecho ya su manifiesto a las autoridades pidiendo por más seguridad, más iluminación y presencia policial pero la situación sigue igual. Estamos en una zona liberada a la acción delictiva por el tráfico y venta de droga y por la situación de prostitución que tenemos. Los vecinos no podemos transitar después de las diez de la noche. Se ve personal policial que ronda pero evidentemente no dan a basto y tampoco es una situación que recae solamente en ellos; es un trabajo más profundo de educación, de mayor toma de conciencia y hay que ir a la raíz de todo esto».
Finalmente, habló sobre otro hecho delictivo en una capilla de una zona aledaña: “en noviembre y diciembre he tenido dos robos en la Capilla Señor de la Cruz de barrio Azopardo. Nos han robado las puertas, cilindros de gas de la cocina, y otras cosas. Todas las denuncias están plasmadas en la Comisaria Sexta, ya no sé si nos corresponde a nosotros tener que seguir bregando por mayor presencia y acción contra estas situaciones pero supongo que también las autoridades máximas están al tanto”.
