El Ingeniero Roberto Bernal, Magíster en Educación, Ciencias Experimentales y Tecnología, fue invitado a la emisión número 71 de “Cátedra Abierta”, programa de divulgación científica y tecnológica transmitido por la 92.9 Radio Universidad y conducido por Héctor Espinoza y Selene Flores.
A lo largo de la entrevista, Roberto se refirió a la novedosa aplicación de la neurociencia en la educación. La neurociencia es la disciplina que estudia el comportamiento del sistema nervioso y de todas las áreas del cerebro, prestando especial atención a sus funciones y conexiones neuronales que posibilitan el desarrollo de la cognición y la conducta de los individuos. La neurona es, precisamente, la unidad básica del sistema nervioso central, y se encarga de recibir y emitir señales para decodificar información y responder con la función orgánica adecuada a nivel nervioso, muscular o glandular.
El ingeniero sostuvo la importancia de la implementación de la neurociencia en la educación debido a los últimos descubrimientos científicos, entre los cuales enumeró:
- Neuronas espejo: son la base del aprendizaje, y su funcionamiento se evidencia cuando interpretamos las acciones de los demás como propias y las imitamos. Por ejemplo, cuando un bebé observa que sus padres sacan la lengua y los imita.
- Recrecimiento de las neuronas: anteriormente se decía que las neuronas “morían” y no podían recrecer. Pero numerosos estudios científicos han comprobado la existencia de moléculas que propician mecanismos de reparación en las células nerviosas maduras.
- Neuroplasticidad: consiste en la capacidad de las neuronas para interactuar entre ellas, y conformar nuevas redes a partir de las experiencias de los individuos, o sea, la habilidad que poseen las neuronas de moldearse con los aprendizajes adquiridos.
Bernal consideró que si los docentes se animan a recurrir a la neuroeducación, “se eficientizaría la enseñanza porque hay varias funciones psicológicas superiores que se aprenden a partir de determinadas edades. En consecuencia, conocer y entender sus alcances permitiría planificar las diferentes etapas de la educación de acuerdo a las distintas capacidades y necesidades de las personas”. Justamente uno de los importantes beneficios de la neuroeducación es que “nos permite saber qué es lo que podemos esperar cuando enseñamos, ya que para poder desarrollar ciertos aprendizajes abstractos, es perentorio que maduren áreas específicas del cerebro” explicó el entrevistado.
