El secretario general de ATE Jujuy, Matías Brizuela, recurrió este jueves a la justicia y se mostró sorprendido por la iniciación de causas en su contra y en la de otros delegados y trabajadores del sindicato.
El gremialista contó en Radio Universidad (92.9 y unjuradio.com) que esto gira en torno a las medidas de fuerza iniciadas en la Dirección Provincial de Estadísticas y Censos (Dipec), cuya titular Ana Juárez Orieta -con la anuencia del gobernador Gerardo Morales- dispuso el despido de siete trabajadores del organismo que exigían el pase a planta permanente y que luego fueron acusados de adulterar datos de «la pobreza en la provincia», según denunció Juárez Orieta.
Brizuela se deslindó de las acusaciones y sostuvo que «este gobierno no quiere reclamos de trabajadores y busca permanentemente pintarle los dedos al sindicalismo en su conjunto y así amedrentar la lucha estatal».
