Días pasados, el Ministro de Infraestructura de la provincia, Jorge Rizzotti, volvió a comentar sobre el futuro del puente construido en Avenida Bolivia frente al Rectorado de la UNJu, señalando que equipos técnicos de la institución que encabeza consideran que el mismo es imposible de usar en sus condiciones actuales. Estos mismos especialistas señalaron que la obra tiene errores en el diseño que se agravaron en la construcción, y todos esos factores se consideraron para calificarla como inutilizable.

Rizzotti dijo que están esperando otro informe técnico de una consultora cordobesa especializada en obras viales para decidir el futuro del puente; “si para que el puente pueda ser utilizado hay que hacer obras de infraestructura y volver a invertir millones de pesos, nos parece que mejor será tomar la decisión que el propio gobernador alguna vez expresó, demoler el puente. Y buscaremos a los responsables de una obra que le costó a la provincia 30 millones de pesos”.

El titular de Infraestructura agregó que aún no se realizaron presentaciones judiciales porque están esperando este informe de Córdoba, e “iniciar acciones en la justicia demandará tiempo, algo que podría complicar la demolición del puente”.

En este sentido, subrayó la irresponsabilidad de quienes construyeron el puente, no solo por concretar la obra, sino por seguir adelante con la misma cuando el gobernador Morales, después de asumir en su cargo, solicitó que se frene la misma.

“El puente no estaba hormigonado, faltaban terraplenes, quedaba mucho por hacer y era fácil desarmarlo. Fue una decisión del ex gobernador, del ex Ministro y del Secretario de Infraestructura que la obra se termine. Hay irresponsabilidades que tienen que ver con el cargo que ocupaban e iniciaremos las acciones que sean necesarias”, agregó Rizzotti.