El proyecto enviado por el Ejecutivo al Congreso de la Nación desfinancia sensiblemente el arte con la eliminación del Instituto Nacional del Teatro y del Fondo Nacional de las Artes. Además modifica el sistema de asignación de recursos del Instituto Nacional de la Música (INAMU), el INCAA y la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares.
El comunicado dice: Las consejeras y consejeros, las representaciones provinciales, direcciones de áreas, trabajadores e integrantes del jurado del Instituto Nacional del Teatro hacemos un llamado al Congreso de la Nación para que no se apruebe el proyecto «Ley de Bases y Puntos de Partida para La Libertad de los Argentinos», conocida públicamente como «ley ómnibus».
«Nos vemos directamente afectados por la propuesta de derogación de la Ley Nacional del Teatro (24.800), con la consecuente desaparición del Instituto Nacional del Teatro, junto a la Ley de No Demoliciones de Salas (14.800)», se lee en otro párrafo. Además resaltan que «ambas leyes son fundamentales para el fomento, desarrollo y protección de las comunidades de trabajadoras y trabajadores del sector teatral nacional».
Destacan que este proyecto genera preocupación en organismos de la Cultura Nacional y se sienten afectados.» Solicitamos al Poder Ejecutivo Nacional, al Ministerio de Capital Humano y la Secretaría de Cultura de la Nación, desistir del mismo porque esta medida aniquila la actividad teatral independiente argentina. A su vez, pedimos también que se designe la nueva Dirección Ejecutiva», remarcan.
«El teatro es trabajo y, como tal, generador de miles de fuentes de empleo», subraya el comunicado y agrega que está en riesgo la continuidad laboral de cientos de trabajadores a lo largo y ancho del país.
En ese sentido, exigen respeto a todas las generaciones teatrales del país, que «construyeron los caminos que fortalecieron y respaldaron la creación de la Ley 24.800. La Ley Nacional del Teatro fue creada en 1997 y este año celebramos su 25 aniversario. Es una ley emblemática de la democracia».
Finalmente, los representantes del INT de todo el país se declaran «en estado de alerta, movilización y en diálogo permanente con las comunidades teatrales» con el fin de rechazar las derogación del proyecto de Ley y que «intenta cerrar, intervenir y desfinanciar a las instituciones». «Esta agenda incluye un vigoroso diálogo con legisladores para dar cuenta de la importancia de conocer los problemas que generaría la aprobación de esta ley ómnibus que atenta contra la vida de la ciudadanía y del sector cultural en particular», subrayan.
Gustavo Ramírez, representante del Instituto Nacional del Teatro en Jujuy señaló que «esta ley no solamente nos desfinancia sino que hace nos hace desaparecer en todo el país».
«Somos unos de los pocos organismos con representación federal en todas las provincias».
En dialogo con Unjuradio, Ramírez destaco el trabajo que realizan en la provincia promoviendo el arte y realizando capacitaciones.
«Generar pensamiento critico a través del arte sigue siendo peligroso para ciertos sectores», indicó y agregó que «los países desarrollados financian y fomentan la actividad cultural en todos sus aspectos».
«Todos los sectores culturales estamos en estado de alerta, estamos hablando de una multisectorial del arte. Estamos hablando con gente del INAMU, del INCAA para volver a nuclearnos a nivel regional y nacional y calzarnos de nuevo los botines para volver a salir a la calle militar por la cultura», precisó Ramírez.
Explico que la ley ómnibus de Milei no solo perjudica a los hacedores/as de teatro sino también «a toda la comunidad».
Por último, Gustavo Ramírez afirmó que por el momento el Instituto nacional del Teatro «esta acéfalo sin poder funcionar».