La Dra. Liliana Bergesio, actual vicerrectora de la Universidad Nacional de Jujuy, realizó en UNJu Radio un análisis sobre la regulación de las protestas en el marco de la reforma parcial de la Constitución Provincial.

Sobre ese punto, Bergesio aseguró: “Nosotros desde la Universidad venimos participando de distintas formas, y cuando digo ‘participando’, si estaría escribiendo lo pondría entre comillas, fundamentalmente, estamos teniendo una participación que en sí misma es parcial, pero desde un primer momento, hubo hace unos meses, antes de las elecciones provinciales, cuando se anunció esta reforma parcial de la Constitución, una primera convocatoria a muchas instituciones, a muchos organismos provinciales, para que opinemos, entre ellos a la Universidad Nacional de Jujuy”.

Sobre las diferentes miradas, Bergesio aseguró: “Me parece que desde la Universidad tenemos ciertos acuerdos en que está bien en que se planteé una reforma constitucional, pero quizás no era el mejor momento, en medio de elecciones provinciales, elecciones nacionales, quizás es mejor elegir un tiempo de más calma electoral, porque también un tiempo electoral se están jugando otras cuestiones, y después el que tenemos que tomarnos los tiempos, es una reforma constitucional, no debería plantearse como algo apresurado, pero después, tenemos también, quiero aclarar que la Universidad no tiene una postura unívoca, única, sino que distintos profesionales, distintos miembros, pueden tener distintas visiones, entonces también hay que considerar eso, que cuando hablamos también hablamos desde nuestras propias opiniones”.

En las elecciones realizadas el pasado mes de mayo, no solo se eligió al Gobernador, 24 diputados provinciales y 10 suplentes, sino también a los 48 convencionales constituyentes, con sus 10 suplentes.

Desde el 23 de mayo, inició sus tareas la Convención Constituyente, pero también desde ese día se realizaron diferentes marchas por las principales calles céntricas de San Salvador.

La vicerrectora, Liliana Bergesio se refirió a las marchas realizadas por organizaciones sociales, de comunidades indígenas y gremios, y aseguró: “Si hay sectores de la sociedad como vemos en las redes como ahora vemos en las calles, que manifiestamente están en desacuerdo con muchos puntos, deberíamos plantearnos como sociedad, tomarnos el tiempo que sea necesario para llegar a los acuerdos, convoquemos, escuchemos todas las voces, hablemos con todos los actores sociales, porque de hecho una reforma Constitución constitucional es algo que rige los destinos de la provincia por décadas y si bien elegimos a nuestros Convencionales Constituyentes, en elecciones libres y abiertas, también, ahora voy a hablar a título personal, tengo mis reservas de qué tan informada estaba la ciudadanía en general de la función y lo que realmente estaba votando como Convencional Constituyente, porque no tuvimos tanta información sobre eso, entonces más allá de que nos representen hay ahí también un tema de debate”.

Hoy lunes, los Convencionales Constituyentes en el marco de la reforma parcial de la Constitución, trataron en la Casa de Piedra uno de los puntos más delicados que está relacionado con la reglamentación del derecho a la manifestación y la protesta, como así también las incorporaciones constitucionales relacionadas con la prohibición de cortes de rutas y calles.

Sobre este punto, Bergesio fue tajante y aseveró: “Es un tema sumamente delicado que merece mucho debate, también hay otros en esta reforma, pero es el tema del día de la fecha, es un tema sumamente delicado, porque también no se reconoce la historia del triunfo de los movimientos sociales y cómo se han obtenido absolutamente todos los derechos, a lo largo de toda la historia”.

“Todos los derechos de los trabajadores, los derechos de las mujeres, los derechos de las minorías, cualquier derecho, siempre se ha logrado con las protestas en las calles. Pensemos que desde el Mayo Francés, en mi cabeza me pasan imágenes, desde fines desde la sufragistas en el siglo XIX, los movimientos juveniles, estudiantiles, ‘El cordobazo’, ‘El Correntinazo’, nosotros cuando hablamos del jujeñazo, en la década de los 90, o sea como trabajadores y trabajadoras, siempre las calles han sido nuestro único lugar donde peticionar, dónde reclamarle a las instituciones, a los organismo del estado por nuestros derechos, y así se han ido ganando derechos, pero no estoy hablando de Jujuy en los últimos cinco años, sino de la historia de los movimientos de los derechos humanos, en realidad así ha sucedido históricamente, entonces omitir, cercenar esa posibilidad, ¿Dónde nos deja a los ciudadanos y las ciudadanas? ¿Dónde nos deja para peticionar para reclamar, para decir no estoy de acuerdo? O quizás para decir estoy de acuerdo, inclusive”.

“Entonces cercenar ese derecho, el derecho a la protesta en sí mismo, la verdad que, es claramente ir en contra, es atrasar 150 años, sacando cuentas en realidad 140 años, es atrasar más de un siglo, atrasar un siglo y medio casi en derecho civiles es bastante raro, pero se entiende, es rarísimo pero se entienden los las voluntades y esto no debería ser constitucional definitivamente” aseguró la funcionaria.

Bergesio volvió a reiterar la importancia de la reglamentación del derecho a la protesta: “Las constituciones legislan, en realidad norman el funcionamiento, en este caso de una provincia o de un país, en cuestiones macro, en cuestiones generales y también con una fuerte extensión en el tiempo”.

“Entonces pensar en tiempos muy cercanos, en acontecimientos muy puntuales, en personas muy determinadas, es decir, yo quiero convertir en constitucional algo, porque no quiero que fulano o fulana llegue a tal o cuál situación, la verdad que eso no puede ser constitucional, eso no debe estar en la Constitución, tenemos que ponernos muy por encima de deseos personales, o de situaciones coyunturales que realmente no hacen o no deberían hacer a ese tipo de decisiones, porque aparte el impacto que van a tener en la vida concreta de las personas es muy fuerte, entonces ahí hay un tema muy discutible, por eso vuelvo a lo que decía un poco al principio, por eso una constitución no puede ser el deseo de unos pocos, sino que tiene que ser algo realmente discutido y debatido socialmente”.

“Si estamos viendo a grandes franjas de la sociedad que no están de acuerdo, simplemente paremos la pelota, nos detengamos y digamos ‘No hay que sacarlo mañana’, nos tomemos el tiempo que sea necesario, abramos las puertas que haya que abrir, escuchemos a las personas que tengamos que escuchar, debatamos, volvamos a hacer, no se si votaciones, pero volvamos a ser instancias democráticas, habilitemos instancias de diálogo democrático, para llegar a un producto final que nos guste a todos, hay una frase de un de un libro de García Márquez, que dice ‘los sueños de unos son las pesadillas de otros’, entonces yo creo que siempre hay que jugar en qué ni sean los sueños de unos, ni las pesadillas de otros, donde todos ganemos un poquito y perdamos un poquito, pero no podemos construir una provincia que porque es el sueño de algunos pase a ser La pesadilla de los otros, eso es inadmisible”.

Bergesio también se refirió a otro punto de la reforma parcial que habla sobre defender la paz en la provincia: “Ahora hablo a título estrictamente personal, pero por ejemplo, hay un ítem de esta reforma constitucional que plantea, ahora no recuerdo las palabras textuales, pero es algo así como que ‘la provincia adhiere a defender la paz’, yo todo el tiempo me pregunto ¿Qué es la paz? ¿Qué estamos entendiendo por paz? Porque si por paz entendemos que la paz es el no disenso, la no discusión, el no oponerme, pues déjenme decirle que al menos yo, estoy hablando a título estrictamente personal, al menos yo no estoy de acuerdo, yo soy una científica, circunstancialmente soy Vicerrectora, pero fundamentalmente yo hago ciencia y hago ciencias sociales, yo me defino como una científica social, encima soy una científica social, que trabaja desde la hermenéuticas, desde las interpretaciones, entonces para mí no ha no existen las definiciones unívocas de nada, de absolutamente nada”.

Por último, la Vicerrectora se refirió a la importancia del diálogo y el debate: “Creo que los seres humanos y la ciencia, se construye en base al disenso, en base a la discusión, en base al debate, en base al diálogo, yo no tengo ningún problema cuando alguien me dice ‘No, no estoy de acuerdo’, es más, nada me hace más feliz en una conversación porque me ayuda a crecer, me ayuda a cuestionarme mis propias prácticas, me ayuda a avanzar, en un sentido puedo pensar ‘esto es para mí pero para vos no’, entonces uno se puede plantear llegar a un acuerdo, veamos cómo esto puede ser mejor”.

“Si no aclaramos que estamos entendiendo por paz, porque ahora sí me dicen ‘La Paz es el opuesto de la guerra’, bueno pues por supuesto que estoy de acuerdo, pero nosotros hace mucho que no estamos en guerra, o sea, no me parece que nos estemos refiriendo a esa paz, lo que pasa que nos estamos refiriendo a otra paz, pero como no se aclara de que paz estamos hablando, tampoco puedo decir claramente si estoy de acuerdo o no, entonces me parece que esos son los debates que hay que dar, y si la paz es no debatir, entonces yo no estoy de acuerdo”.