Fueron palabras de Irene Ballatore, periodista e historiadora, que reiteró en UNJu Radio el sacrificio del pueblo jujeño defendiendo a la patria que estaba naciendo en un contexto de crisis durante la batalla del Día Grande de Jujuy.

Sobre el tema, Ballatore aseguró: “Es muy llamativo que un hecho que ocurre en 1821 que tiene tanta trascendencia no solamente para la Guerra de la Independencia librada en territorio jujeño, sino que tiene importancia nacional, ya que como vamos a ver, representa el haber defendido una patria que estaba naciendo en sus momentos más críticos y difíciles, cuando el resto del país estaba en otra cosa, el resto de las provincias estaban ocupadas de dirimir sus conflictos internos”.

“La famosa lucha de unitarios y federales estaba a flor de piel y las cuestiones centrales como defender el proyecto de Independencia de las invasiones realistas estaba en realidad recostado en el esfuerzo de dos pueblos, Jujuy y Salta que hasta fines del año 1822 están soportando las incursiones de los realistas en distintos niveles”.

Sobre la conmemoración del Día Grande de Jujuy, Ballatore aseguró: “Este Día Grande de Jujuy, estamos conmemorando la batalla que ocurrió en las playas del río León donde esa tenacidad realista va a ser cortada de cuajo, porque nunca más luego de esta acción, de esta victoria tan importante, la ciudad de Jujuy va a caer bajo el dominio de la corona española, así que por eso y porque ocurre en un momento donde estaban desfalleciendo totalmente los pueblos, agotados ya con 11 años de guerra, con luchas intestinas tremendas, sangrientas, sin embargo en Jujuy se pensó que lo primero era defender ese proyecto de país y se actuó en consecuencia”.

Sobre la identidad política de Jujuy, Ballatare aseveró: “En las últimas décadas se fue imponiendo un término, el término ‘un salto jujeño’ ustedes seguro que lo escucharon, para denominar a estas milicias gauchas que luchaban contra los realistas en la Guerra de la Independencia, primero decir que esta expresión jamás fue pronunciada ni por Güemes, ni por Belgrano, ni por el coronel Arias, ni por Manuel Álvarez Prado, ni por San Martín”.

“Esa fue una expresión que se empezó a usar relativamente hace poco y entendemos que no es correcta, nosotros discutimos esa expresión porque primero que, había identidad política de Jujuy, independientemente de Salta, porque Jujuy nunca aceptó ser una ciudad secundaria de Salta, esa fue una decisión que tomó un Rey de España en 1782 aproximadamente, Jujuy no aceptó eso, siempre quiso ser una provincia autónoma, una identidad política propia, entonces, cuando yo digo, ‘salto-jujeño’ estoy ignorando ese deseo de los jujeños de ser una autonomía o de ser un pueblo que decidiera sobre su propio destino y que no estaba de acuerdo con ser una ciudad secundaria de la autoridad salteña”.

Sobre el contexto de la batalla del Día Grande de Jujuy, Ballatore detalló: “Los escuadrones gauchos que operaban en Jujuy, bajo el mando general de Güemes, que era el Gobernador y el Jefe de esa milicia gaucha, tanto de Salta, de Jujuy y Orán, tienen el nombre diferenciado, hay escuadrones que llevan el nombre de los lugares de Jujuy”.

“Entonces cuando nos preguntamos ¿Porqué se llama Día Grande de Jujuy? Porqué no se llamó por ejemplo ‘Día Grande Salto-Jujeño’ digamos, no se llamó ‘salto-jujeño’ porque esa expresión nunca existió en el pasado y porque los jujeños tuvieron la visión con toda claridad de que había sido un triunfo de Jujuy, porque Güemes no estaba a disposición de poder enfrentar esta nueva invasión realista, Güemes estaba embarcado en la guerra contra el Tucumán, milicias gauchas que estaban preparadas en la Quebrada de Humahuaca para partir al Alto Perú, donde según lo que le pidió San Martín, Güemes tenía que llevar un ejército para apoyar la lucha contra los realistas que hacía San Martín en ese momento, que luchaba en las costa peruana, esa tropa la hace retirar Güemes y se la lleva a la guerra contra Tucumán, en consecuencia, nuestra Quebrada queda totalmente desguarnecida, por ese motivo los Realistas, comendados por un obsesivo de la corona española que era Pedro Antonio de la Nieta, va a decidir avanzar y realizar una nueva invasión”.

“La persona, la autoridad que se hace cargo es José Ignacio de Gorriti, que estaba a cargo de la gobernación de Salta por la ausencia de Güemes y Gorriti en tiempo récord, recluta aproximadamente 500 gauchos, de diferentes zonas, de Períco, de la ciudad de Jujuy, de la zona de Yala, de Palpalá también, los recluta y va a preparar un plan que trabaja sobre la idea de la sorpresa y cae sobre los Realistas que estaban acampados sobre la playa del río León, en la madrugada del 27 de abril de 1821 y destroza esa vanguardia Realista que estaba a la espera de refuerzos para avanzar sobre sus objetivos que eran apoderarse de Jujuy y de Salta, por eso se llamó el Día Grande de Jujuy”.

Por último Ballatore nuevamente reitero la valentía del pueblo jujeño que logró poner primero el interés de la Patria: “Si analizamos el escenario de este hecho, un país disuelto, envuelto en una guerra civil tremendamente cruenta y sangrienta, sin embargo hubo personas que fue capaz de poner primero el interés de esa patria que estaba naciendo, lo primero fue salvar la patria, eso fue lo que nos dicen los gauchos del ‘Día Grande de Jujuy'”.