EL 4 de febrero se conmemoró el Día Mundial contra el Cáncer, una fecha para concientizar sobre la importancia la prevención, la detección temprana, el tratamiento y los cuidados paliativos.

El cáncer puede prevenirse, controlarse y curarse implementando estrategias basadas en la evidencia para la prevención, tamizaje y detección temprana del cáncer, el tratamiento y cuidados paliativos.

Existen factores de riesgo comunes para el cáncer y otras enfermedades no transmisibles que son modificables. Entre ellos se cuentan el consumo de tabaco, la baja ingesta de frutas y verduras, el consumo nocivo de alcohol, y la insuficiente actividad física.

Además, algunos factores de riesgo específicos para el cáncer incluyen las infecciones crónicas por virus del papiloma humano (HPV) -para cáncer cervicouterino-, hepatitis B o C – para cáncer de hígado-, y H pylori -para cáncer de estómago.

De un tercio a la mitad de los casos de cáncer pueden prevenirse reduciendo la prevalencia de los factores de riesgo conocidos. El control del tabaco y la vacunación contra VPH son ejemplos de intervenciones.

El Dr. Francisco Gómez, referente provincial del Programa de Cáncer de Mama, explicó a UnjuRadio que en la sociedad circulan diversos mitos sobre el cáncer, y que es importante aclararlos para que las personas sepan como actuar para prevenir, diagnosticar a tiempo y tratar estas enfermedades.

Así sobre la idea de que las personas con parientes con cáncer siempre desarrollarán cáncer, indicó que no es cierto.

Si bien la carga hereditaria es importante, «en la mayoría de los casos se dan en personas que no tienen antecedentes familiares».

Además aclaró que gracias al avance científico y las diferentes estrategias terapéuticas, «se logra controlar en gran medida el cáncer».

Por ejemplo, el cáncer de mama diagnosticado y tratado a tiempo «tiene una tasa de curación de más del 90%».

Por este motivo es fundamental realizar los controles recomendados y «no esperar a tener síntomas».

En Jujuy, los tipos de cáncer más frecuentes son los de mama, cervico uterino, de próstata y colorectal. En todos los casos hay estudios para diagnóstico temprano.

«Estos tipos de cáncer tiene un gran impacto en la salud pública por lo que existen programas específicos para la detección precoz», señaló.

Así, según precisó el médico, los estudios para prevenir el cáncer cérvico uterino, como el PAP y el test HPV, se deben realizar periódicamente a partir de los 25 años o desde el inicio de las relaciones sexuales.

En el caso de la detección precoz del cáncer de próstata los estudios deben realizarse a partir de los 40 años, igual que las mamografías para diagnosticar a tiempo el cáncer de mama.

En el caso del cáncer colorectal «en la provincia comenzó a aplicarse el FecaTest para diagnósticos tempranos».

En relación a la metástasis, explicó que «es un tumor alejado del sitio primario de inicio del cáncer,  por eso consideramos que puede estar en cualquier parte del cuerpo».

«En estos casos, si bien con los tratamientos no se puede asegurar que no pueda volver a aparecer, se puede lograr una mejoría y se puede tener una mejor sobrevida».

«No hay que preocuparse, sino ocuparse», sentenció y recordó que «cuanto antes sea detectada la enfermedad, es mejor el pronóstico, la sobrevida y mayor es la chance de curación».