La Dra. Sofía Achem, Especialista en Ginecología, MP 3470/32 en diálogo con Unju radio 92.9 habló de la enfermedad tromboembolia durante el embarazo.
Al respecto señaló que la trombofilia es una convicción en la cual dentro del torrente sanguíneo se forman trombos (coágulos de sangre) que obstruyen el adecuado flujo sanguíneo.
Indicó que esta condición puede estar ocasionado por un montón de situaciones tantos adquiridos como congénitas. “Podemos nacer con una predisposición a que esto ocurra o esta condición puede desencadenarse en algún momento de nuestra vida por algunos factores predisponentes”.
En referencia sobre la trombofilia en el embarazo. Explicó que en estos casos hablamos en general de una trombofilia adquirida.
“Esta condición afecta a la gestación debido a que la placenta que es un nuevo órgano que se forma cuando quedan embaraza, está armado de una esponja de muchos vasos sanguíneos». “Y lo que provoca esta condición que forman trombos es obstruir total o parcialmente los vasos sanguíneos afectando la evolución del embarazo”,remarcó.
Asimismo resaltó que en función de esto puede provocar perdida de embarazos, problemas en el crecimiento y peso del bebe u otras complicaciones en el embarazo por parte de la mamá de presentar un cuadro de hipertensión, bajo ciertas condiciones suele llamarse preclamsia.
Por otro lado manifestó que el diagnostico se hace a través de un análisis de sangre especifico que debe ser realizados por laboratorios especializados en hemostasia. Aclarando además que «debe ser evaluada fuera de la situación de embarazo o fuera de una situación de trombosis». «Se debe esperar a los menos 3 meses de esta situación debido a que los análisis que solicitan suele tener valores que no reflejan la verdadera condición de trombofilia, puntualizó.
Tambien informó que en pacientes con diagnóstico de Trombofilia Adquirida que no reciben tratamiento, el pronóstico es un 75-85% de probabilidad de presentar algún efecto adverso frente a un 15% si recibís tratamiento.
“Es decir el tratamiento correctamente indicado cambia el pronóstico obstétrico”.
A su vez mencionó que la trombofilia no se puede prevenir es una condición que se desencadena a partir de algunas cuestiones adquiridas que no se conoce exactamente.
Si se puede sospechar frente a esto si hay antecedente familiares o tienen mayor predisposición aquellas pacientes con otras enfermedades autoinmunes como el lupus, enfatizó.
Agregó que hay 2 líneas de tratamiento para esta patología. Una es el Tratamiento Ácido Acetil Salicílico (AAS o aspirina) en baja dosis. Y la otra es Heparina de bajo peso molecular que se indica durante el embarazo y después del mismo, ya que durante el puerperio hay un riesgo aumentado para la madre de padecer trombosis.
Finalmente señaló el tratamiento de esta patología es un derecho del paciente bajo un diagnostico confirmado y esto no puede ser denegado.
En este sentido explicó que no es necesario una ley para tener asegurada la cobertura. En el caso de ser rechaza la cobertura por el sistema de asistencia médica (obra social o prepaga) se debería realizar un reclamo legal, concluyó.
