La contadora Noelia Villafañe, presidenta de Monotributistas Asociados de la República Argentina (MARA), en diálogo con UNJu Radio, se refirió a la alerta ante la situación económica del sector y a los beneficios que otorga la categoría tributaria social.

“Hay mucha desinformación en cuanto al monotributo social y entonces la gente acude a nosotros y pregunta de ué manera podría reducir el gasto del monotributo hoy que no está teniendo actividad, o que se ha disminuido su actividad, y muchos vienen con la idea que, si estaban en el monotributo común, tienen que tener saldadas sus deudas para pasar a ser monotributista social. Esto es erróneo, ya que la persona puede darse de baja en el monotributo con deuda, y pasar a monotributo social siempre y cuando cumpla con los requisitos” , sostuvo la presidenta de MARA.

Sobre los alcances de la herramienta tributaria, Villafañe sostuvo “el monotributo social tienen muchos factores para poder ayudar a aquellas personas que no pueden pagar una categoría tributaria alta. El monotributista social paga 520 pesos, pero tiene los mismos beneficios que alguien en categoría A, por ejemplo, componente previsional. Hoy la gente necesita achicar costos, y recurre a nuestra asociación.

El Monotributo Social es una política de Estado impulsada desde 2004 que promueve la economía social y fomenta las actividades productivas, comerciales y de servicios de la población en situación de vulnerabilidad social. El programa -implementado desde el Ministerio de Desarrollo Social- apunta a aquellos emprendedores que no puedan acceder al mercado de trabajo formal y no tienen las mismas condiciones que otros emprendedores.